No me cansaré de alabar a los champiñones como un producto delicioso, barato y con un montón de posibilidades que ya hemos visto en el blog.
Estamos en temporada de setas, aunque hoy día podemos encontrar gran variedad en cualquier época del año (los champiñones sin lugar a dudas), pero hay que reconocer que alguna variedad micológica de temporada es un auténtico manjar. Hace poco David, colaborador del blog, cocinó unas setas con jamón que estaban tremendas, y me recordó esta receta que tenía por ahí aparcada con ganas de salir a la luz.
Los champiñones al ajillo son un clásico muy sencillo de hacer y con entidad suficiente como para no necesitar nada más, pero como somos muy tragones hemos añadido un poquito de jamón y huevo, y oye, un punto sí que lo da.
INGREDIENTES
(para 4 personas)
- 1/2 kg de champiñones enteros (no hace falta que sean muy grandes)
- 4 lonchas de jamón (o unos 60 grs de taquitos de jamón)
- 2 huevos
- 2 ó 3 dientes de ajo
- una guindilla cayena
- 50 ml de vino blanco para cocinar
- una cucharadita pequeña de harina de maíz
- aceite de oliva
- sal
- perejil
PREPARACIÓN
- Empezamos limpiando los champiñones si fuese necesario, o simplemente cortándolos el pie para quitar posible suciedad. Los troceamos en cuartos si no son muy grandes y reservamos.
- En una sartén o cazuela baja, con unas tres cucharadas de aceite de oliva, rehogamos los ajos (en láminas o cuadraditos, como más os gusten). Añadimos la cayena.
- Cuando el ajo empiece a tomar color dorado pálido bajamos el fuego (en este punto yo suelo retirar la cayena, pero si te gusta más picante la puedes dejar) y añadimos la cucharadita de harina de maíz (no mucho, sólo lo queremos para que espese la salsa al final). Removemos para que se cocine sin quedar cruda.
- Vertemos el vino blanco y removemos para que evapore el alcohol (es importante que el fuego esté bajo).
- Añadimos el jamón y los champiñones, una pizca de sal (poco que ya sala el jamón) y subimos el fuego (fuego medio). Removemos y tapamos un par de minutos para que suden.
- Destapamos y dejamos cocinar unos 5 minutos más, removiendo de vez en cuando, hasta que evapore el líquido que habrán soltado los champiñones y la salsa esté a nuestro gusto.
- Al final añadimos los huevos cocidos cortados en cuartos y perejl fresco picado.
¡Qué receta tan maravillosa! La verdad es que incluir el jamón como uno de los ingredientes principales a este tipo de platos es una decisión de lo más acertada porque este producto aporta un sabor espectacular a las comidas. El jamón ya de por sí tiene un sabor maravilloso, pero si además se le incluye en recetas de este estilo, queda un plato de lo más exquisito. ¡Un saludo!