Hoy vamos con un entrante, que si os gusta el queso no lo podéis dejar pasar. Es un manjar.
El queso provolone es originario del sur de Italia, siendo su denominación protegida «Provolone Valpadana». Se comercializa en la mayoría de los supermercados en rodajas de 1-2 cm de grosor.
En este caso lo he hecho a la plancha, para lo cual necesitamos que esté muy caliente (se puede usar una sartén), para que forme costra rápido y quede cremoso en su interior.
INGREDIENTES
- 1 rodaja de queso provolone
- 1 tomate
- 1 latilla de anchoas en aceite de oliva
- orégano
- sal
- perejil
- aceite de oliva
PREPARACIÓN
- Lavamos bien el tomate y lo troceamos en rodajas no muy gruesas.
- Colocamos alrededor de una fuente con un poco de sal y perejil picado.
- Ponemos una anchoa enrollada sobre cada rodaja de tomate.
- En una plancha o sartén, con una gota de aceite, marcamos el queso provolone por ambos lados. Es importante que la plancha o sartén esté muy caliente para que se derrita pero forme costra en su superficie (en la foto no estaba lo suficientemente caliente y se desparramaba más de lo que hubiera deseado)
- Colocamos el queso en el centro de la fuente y espolvoreamos con orégano y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Me encanta el provolone, qué buena elección!!