Pedazo nombre para una tapa, eh? La verdad es que es ir nombrando los ingredientes, porque todo eso lleva. Y lo mejor, es muy fácil de hacer.
Esta es una de las tapas que este verano hemos hecho durante las Fiestas del Salvador de Herrín de Campos, en el Taller de pinchos organizado por la Asociación Cultural La Mujer Emprendedora, que este año era ya su tercera edición.
En el taller hicimos tres tapas, esta salada, otra con un contraste dulce-salado y otra de postre. Ya pondré las otras dos, pero ahora vamos con esta tapa, que no es tan complicada como parece indicar el nombre.
INGREDIENTES
- pan de baguette
- calabacín
- pechuga de pollo fileteada muy fina
- mantequilla
- harina
- leche
- sal
- nuez moscada
- puerro
- popurrí de pimienta
- aceite de oliva
PREPARACIÓN
- Con una mandolina cortamos rodajas finas de calabacín y salamos.
- Igualmente salpimentamos (he usado un popurrí de varias pimientas, lo venden ya así) las pechugas de pollo cortadas en filetes lo más fino posible, para que solo necesite un momento de plancha. Reservamos el pollo y calabacín.
- En un cazo ponemos agua a hervir con sal. Cuando hierva sumergimos las espinacas, si son frescas basta con unos segundos y retiramos a otro recipiente con agua fría (si son en un bloque congelado hasta que se deshaga el bloque).
- Mientras, en un cazo bajo o sartén haremos la besamel: derretimos mantequilla, añadimos la misma cantidad de harina y dejamos cocinar sin que se tueste, vertemos la leche templada y removemos para que no se formen grumos. Añadimos sal y un poco de nuez moscada y dejamos cocinar hasta que la besamel adquiera la textura deseada. Podemos seguir la receta de la besamel aquí (aunque está hecha con aceite de oliva, los pasos son los mismos).
- Mezclamos a la besamel las espinacas bien escurridas e integramos (si no hemos escurrido bien las espinacas y se nos ha quedado ligera la besamel mantenemos un poco más al fuego).
- En una plancha con una gota de aceite marcamos las rodajas de calabacín y seguidamente los filetes finos de pechuga de pollo.
- A su vez, en una sartén con aceite de oliva freímos los puerros cortados en juliana (en tiras) hasta que empiecen a ponerse dorados (cuidado que se queman con facilidad) y retiramos a un plato con papel absorvente.
- Montamos la tapa sobre pan de baguette, con una rodaja de calabacín a la plancha, un trozo similar de pechuga de pollo, una cucharada de besamel de espinacas y unas tiras de puerro frito.
Me encantó esta receta.
Muchas gracias 😉