Sencillamente deliciosos. Materia prima cien por cien, buenos calamares de potera y tomate natural. No hay más.
Este año el huerto ha tardado en arrancar, sobre todo con los tomates, que me parecen un manjar recién cogidos, pero también está tardando en parar, estamos cogiendo tomates hasta la semana pasada, y ya es Noviembre!! Son los últimos y se maduran en casa, ya no son tan ricos, pero aún se puede hacer una buena salsa de tomate natural. La receta de la salsa de tomate está en el enlace, y se puede tener preparada previamente, así vamos directamente a la preparación de los calamares.
Si te quieres dar el capricho, los calamares de potera son los mejores, más caros pero el sabor es mucho mejor. Reconozco que en la foto del paso a paso he usado otros, los que generalmente venden en las grandes superficies, que suelen venir congelados y la piel se desprende al lavarlos. Si son frescos y buenos no quites la piel, los lavas pero conservando la piel, que aporta sabor al plato.
INGREDIENTES
- 2 calamares medianos
- 2 ó 3 tomates maduros
- 1 cebolleta
- 1 diente de ajo + 1 diente de ajo para la salsa
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- azúcar
- perejil
PREPARACIÓN
- Limpiamos los calamares, respetando la piel si son frescos. Reservamos.
- Hacemos la salsa de tomate. Para ello rehogamos la cebolleta y el ajo y cuando tome un color dorado añadimos el tomate pelado y troceado. Dejamos cocinar hasta que tenga la textura que deseemos y trituramos. Ver la receta de salsa de tomate casera.
- En una sartén o wok con un poco (una cucharada) de aceite de oliva sofreímos el diente de ajo en láminas, que retiramos cuando se doren, lo queremos para aromatizar el aceite y podemos utilizar al final (a mi no me gusta, pero este ajo doradito es un manjar para muchos paladares). Con el aceite caliente añadimos el calamar troceado, que haremos prácticamente a la plancha a fuego medio-alto.
- Un poco antes de que esté hecho añadimos la salsa de tomate y dejamos cocinar un par de minutos más para que se termine de hacer y se integren los sabores. Suelo añadir la salsa de tomate caliente, para no cortar la cocción del calamar.
- Servimos con perejil fresco picado y un buen trozo de pan, para mojar esta salsa. Divino.